En la luz y en la oscuridad

—Ahora hablaremos tú y yo acerca de la luz y la oscuridad —mencionó el Maestro —, no sin antes pedirte que medites en todo lo visto hasta ahora, repásalo.

—Entiendo Maestro —. Respondí, llevando a cabo lo indicado por el Maestro.


Posteriormente de haberlo hecho moví la cabeza asintiendo en señal que me encontraba listo para continuar a lo cual el Maestro de igual manera asintió con la cabeza.

—La luz, como la generada por las velas que se encuentran en esta habitación, representa ESPERANZA, que veremos más adelante, la luz representa el bien con su contra parte la oscuridad que representa la DESESPERANZA, el mal, que de igual forma veremos más adelante —mencionó el Maestro —, también representan el comienzo y el fin respectivamente

—Continuando con el ejemplo anterior de la hoja —prosiguió el Maestro —, se abren dos vertientes siendo la primera de ellas cuando la hoja es arrancada por las fuertes ráfagas de viento que al no haber anticipado que esto sucedería queda flotando a la deriva (queda atrapada por las adversidades) y la segunda cuando la hoja se anticipa y por si misma se desprende habiendo planeado en donde y cuando caer (se anticipa para no ser “atrapada” por la adversidad). En ambos casos la hoja tomará acciones basadas en un deseo siendo su deseo en el primer caso el buscar una acción que la haga salir de los problemas, de los obstáculos en los que se encuentra y en el segundo caso su deseo será el buscar una acción que le permita continuar viviendo plenamente y, en ambos casos, mientras más fuerte sea su deseo implica que en igual medida será su voluntad de realizar las acciones que den a lugar por lograr su cometido.

—Existe un común denominador en todo lo dicho llamado ACCIONES —prosiguió el Maestro —, dado que en este mundo el desear algo y el no realizar las acciones correspondientes para lograr que se cumpla se traduce en crear un mundo irreal dentro de la realidad misma. Podemos pasar una eternidad pensando en el mundo ideal que queremos, en pensar y desear que tengamos plenitud absoluta sin embargo EL PENSAMIENTO SIN ACCIÓN ES LA NADA EN LA REALIDAD.

—Una pregunta Maestro —interrumpí —, todos tenemos la opción de elegir el camino que queremos, ya sea anticipándonos a tomarlo antes de caer en el error o retomándolo posteriormente de haber caído en el propio error por no haberlo anticipado tal como visto en su momento, de igual manera ¿cada persona decide sus ACCIONES, ya sean buenas o malas, y en función a qué se consideran buenas o malas?

—Tú dímelo, tú mismo sabes la respuesta —. Respondió el Maestro.


Procedí a externar lo que pensaba al respecto siendo que cada quien decide realizar las acciones que den a lugar, lo cual no depende de nadie, solo de uno mismo, incluso si otra persona trata de manipular sobre la elección de las acciones, la acción final dependerá únicamente de uno mismo ya que cada quien conoce, sabe de una u otra manera las consecuencias que conlleva el realizar tal o cual acción donde como visto depende esto último del tiempo y espacio en el cual se lleven a cabo.

Continué... Si la contundente ráfaga llegó arrancando y enviando a aquella hoja a la deriva ya nada es posible hacer para evitarlo, el tiempo no se regresa únicamente en nuestra mente que de hacerlo se crea una irrealidad dentro de la realidad misma del momento, de tal forma que no pierdas tiempo en nostalgia, tristeza, añoranza alguna, eso ya pasó y como dicho, es permitido el recordar más no el revivir aquellos momentos, solamente es conveniente el recordar el o los errores cometidos para evitar volver a caer en los mismos (“lo importante no es equivocarse sino el equivocarse dos veces en lo mismo”), de tal forma que al estar inmersos en la adversidad debemos ocupar la capacidad de recordar para determinar las últimas señales recibidas antes de llegado el holocausto, antes de haber caído en la arena movediza de la adversidad, analiza las señales, ¿Que trataban de decirte? ¿A dónde te encaminaban? ¿Cuáles serían las consecuencias de realizar las acciones de las señales (considera que llegarán divagaciones, la prueba misma sobre las TENTACIONES, las cuales al encontrarte inmerso en la angustia, en el hambre, en la desesperación atacarán con mayor fuerza creando los espejismos producto del mundo etéreo que denominaba el Maestro como el “ELEMENTO NEUTRO” dentro de este mundo)? ¿Con cuántos elementos cuento para llevar a cabo cada una de ellas con la finalidad de poder seguir ese camino que se manifiesta?

Debes tomar el tiempo necesario, el tiempo de meditación plena, no se debe tomar la decisión final a la ligera o de manera emocional simplemente con respecto a la señal a seguir, recuerda que la decisión final conllevará a una acción y ésta a su vez a un destino. Valora tu tiempo, valora la meditación que es la única “herramienta” con la que contamos para adentrarnos en el tiempo y espacio, ya sea hacia un pasado, un presente y un futuro, de la cual todos tenemos la capacidad de utilizar más no todos la ocupamos y en muchos casos solamente para crear irrealidad dentro de la realidad, envolviéndose en su propio mundo hasta quedar atrapados en él, incluso buscando quién siga su misma irrealidad, ¿quien asume más consecuencias negativas el que "conduce" a una irrealidad o quién las sigue atrapado por la manipulación de aquel que la creó? La respuesta es clara.

Cada ACCIÓN se rige por la base de CAUSA Y EFECTO, que involucra tanto al bien como al mal como CONSECUENCIA final de la ACCIÓN misma llevada a cabo.

Un sentimiento de culpa es el resultado de un estado de auto conciencia basada en el tiempo y en espacio de las consecuencias de una determinada ACCIÓN cuando se conoce la diferencia de lo que es bueno y malo (como el ejemplo del niño que entró a la tienda).

El determinar si la ACCIÓN es BUENA o MALA se basa en las...

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Aquí se omite texto de la publicación completa

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Libro como hojas en el viento en la luz y en la oscuridad




Mauricio g Borrego
Autor